Autora: Alejandra Ibarra Nájera

Coordinadora de la Unidad de Justicia Penal

En el ámbito de la justicia penal, nos sumergimos con compromiso profundo en la tarea de brindar una defensa técnica gratuita a aquellas personas privadas de su libertad. Nos enfrentamos con determinación a acusaciones injustas de delitos, ya sea a nivel local o federal, con el firme propósito de restablecer el equilibrio y proteger los derechos fundamentales de quienes confían en nuestra labor.

Nuestra misión se centra en la búsqueda constante de estrategias, soluciones prácticas y salidas alternativas que permitan a las personas beneficiarias recobrar la libertad que les ha sido arrebatada, desempeñando un papel crucial en la protección de derechos y el funcionamiento eficaz del sistema de justicia penal.

En este empeño, nos esforzamos por asegurar que aquellas personas que carecen de los recursos necesarios para obtener representación jurídica encuentren en nosotros un respaldo fundamental durante su proceso legal, ya sea dentro del marco del sistema tradicional o en el contexto del sistema penal acusatorio y oral.

Además de ofrecer asistencia legal a aquellos que se encuentran en proceso, extendemos nuestro compromiso a las personas ya sentenciadas por un delito. Realizamos la elaboración de medios de impugnación cuando consideramos que las determinaciones de las autoridades judiciales perjudican a los favorecidos, derivado de violaciones al debido proceso, elaborando argumentos basados en estándares nacionales e internacionales de prerrogativas fundamentales.

Finalmente, nos esforzamos por garantizar que tengan un acceso rápido y equitativo a los beneficios que les otorga la ley; al tiempo que abogamos por la pronta provisión de servicios médicos en casos en los que se les ha negado este derecho fundamental. Este enfoque integral busca salvaguardar los derechos inherentes a todas las personas privadas de su libertad, asegurando que cada individuo reciba un tratamiento justo y humano en todas las etapas de su proceso legal.

El proceso de nuestro trabajo comienza desde el primer contacto con la persona privada de su libertad, principalmente en el interior del penal, a través de campañas enfocadas en la reinserción social, un derecho humano que asiste a todas las mujeres y hombres privados de su libertad. En ese momento generamos las condiciones para una escucha, identificando las necesidades del usuario o usuaria, como asesorías en caso de solicitar la defensa. Reiteramos nuestro compromiso en garantizar una defensa adecuada, comprometiéndonos a realizar un estudio exhaustivo del proceso y luego plantear una línea de defensa que se construye con todas las partes involucradas, es decir, la persona beneficiaria, la red de apoyo y el equipo de Perteneces.  

Durante el camino, hemos coadyuvado en el funcionamiento del sistema de justicia. Obtener la libertad de una persona, es un gran logro para el área de justicia penal pues es el resultado de las estrategias planteadas por el equipo jurídico. No podemos dejar de mencionar lo invaluable de los abrazos, las sonrisas, las lágrimas y las palabras de agradecimiento que hemos recibido durante más de una década de trabajo.

Las historias que hemos acompañado, ahora son parte de la nuestra y nos recuerdan siempre nuestro compromiso para perseguir la garantía de acceso a la justicia para todas las personas.